La CNDH Confronta el Informe de Derechos Humanos del Departamento de Estado de EE.UU.”
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), presidida por Rosario Piedra Ibarra, ha respondido a las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador al informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre los derechos humanos en México. En un comunicado de 18 páginas, la CNDH sostiene que el informe no refleja con precisión los avances que México está realizando en materia de derechos humanos.
La CNDH defiende la política de derechos humanos del actual gobierno y sostiene que ha habido cambios significativos positivos en este ámbito. Atribuye las graves violaciones a los derechos humanos, como los casos de Acteal, Ayotzinapa y El Charco, al modelo neoliberal y a las fallidas estrategias de seguridad.
Frente a las afirmaciones del informe estadounidense de que las denuncias por violaciones a los derechos humanos no se investigan ni se procesan, la CNDH presenta una serie de datos. Desde 2008 hasta 2023, se emitieron 1,916 recomendaciones, de las cuales 149 se clasificaron como violaciones graves. Solo en el último año, se emitieron 370 resoluciones, 59 de las cuales fueron por violaciones graves a los derechos humanos.
Aprovechando el conflicto entre el presidente mexicano y el Departamento de Estado de Estados Unidos, la CNDH presentó un breve informe de la gestión de Piedra Ibarra. Este informe incluye gráficos sobre el número de personas atendidas, quejas recibidas, expedientes abiertos y recomendaciones emitidas. Destaca la reducción del presupuesto en un 37% con respecto a 2019 y señala que en 2021, el INEGI informó que la mayoría de las quejas por violaciones graves a los derechos humanos fueron registradas por las comisiones estatales, con 98,641 casos, frente a los 14,823 de la CNDH.
El informe también incluye una gráfica sobre los 8,993 casos de desapariciones forzadas y por particulares registrados por la CNDH desde 1956 hasta 2023. Estas cifras son significativamente inferiores a las más de 114,000 inscritas en el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, que incluyen víctimas desde 1962.
El informe sostiene que el número de expedientes abiertos en la CNDH por detenciones arbitrarias ha disminuido durante la gestión de Piedra, con 385 expedientes, en comparación con los 10,985 abiertos por este tipo de violación a los derechos humanos por el organismo de 2006 a 2019.
En cuanto a las quejas contra la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el organismo informa que se registraron 1,223 de 2020 a 2022, mientras que de 2007 a 2019 se documentaron 10,520 denuncias contra personal militar.
Sin mencionar el carácter militar de la Guardia Nacional, la CNDH compara las cifras más altas de registros de abusos cometidos por esta corporación con los picos de la extinta Policía Federal, que tenía carácter civil. De la Policía Federal, los reportes más elevados fueron en 2009 (648), 2011 (766) y 2012 (794), mientras que de la Guardia Nacional, el organismo sostiene que el número más alto de quejas se registró en 2022 con 577.
Finalmente, la CNDH advierte que está trabajando para responder de manera integral al informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre Derechos Humanos, en un análisis detallado y más preciso, dirigido principalmente al pueblo de México, que es el único autorizado para juzgar lo que realmente sucede en nuestro territorio y al que esta Comisión debe rendir cuentas.
La CNDH defiende la política de derechos humanos del actual gobierno y sostiene que ha habido cambios significativos positivos en este ámbito. Atribuye las graves violaciones a los derechos humanos, como los casos de Acteal, Ayotzinapa y El Charco, al modelo neoliberal y a las fallidas estrategias de seguridad.
Frente a las afirmaciones del informe estadounidense de que las denuncias por violaciones a los derechos humanos no se investigan ni se procesan, la CNDH presenta una serie de datos. Desde 2008 hasta 2023, se emitieron 1,916 recomendaciones, de las cuales 149 se clasificaron como violaciones graves. Solo en el último año, se emitieron 370 resoluciones, 59 de las cuales fueron por violaciones graves a los derechos humanos.
Aprovechando el conflicto entre el presidente mexicano y el Departamento de Estado de Estados Unidos, la CNDH presentó un breve informe de la gestión de Piedra Ibarra. Este informe incluye gráficos sobre el número de personas atendidas, quejas recibidas, expedientes abiertos y recomendaciones emitidas. Destaca la reducción del presupuesto en un 37% con respecto a 2019 y señala que en 2021, el INEGI informó que la mayoría de las quejas por violaciones graves a los derechos humanos fueron registradas por las comisiones estatales, con 98,641 casos, frente a los 14,823 de la CNDH.
El informe también incluye una gráfica sobre los 8,993 casos de desapariciones forzadas y por particulares registrados por la CNDH desde 1956 hasta 2023. Estas cifras son significativamente inferiores a las más de 114,000 inscritas en el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, que incluyen víctimas desde 1962.
El informe sostiene que el número de expedientes abiertos en la CNDH por detenciones arbitrarias ha disminuido durante la gestión de Piedra, con 385 expedientes, en comparación con los 10,985 abiertos por este tipo de violación a los derechos humanos por el organismo de 2006 a 2019.
En cuanto a las quejas contra la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el organismo informa que se registraron 1,223 de 2020 a 2022, mientras que de 2007 a 2019 se documentaron 10,520 denuncias contra personal militar.
Sin mencionar el carácter militar de la Guardia Nacional, la CNDH compara las cifras más altas de registros de abusos cometidos por esta corporación con los picos de la extinta Policía Federal, que tenía carácter civil. De la Policía Federal, los reportes más elevados fueron en 2009 (648), 2011 (766) y 2012 (794), mientras que de la Guardia Nacional, el organismo sostiene que el número más alto de quejas se registró en 2022 con 577.
Finalmente, la CNDH advierte que está trabajando para responder de manera integral al informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre Derechos Humanos, en un análisis detallado y más preciso, dirigido principalmente al pueblo de México, que es el único autorizado para juzgar lo que realmente sucede en nuestro territorio y al que esta Comisión debe rendir cuentas.
