México bajo agua: la Guardia Nacional despliega auxilio en cuatro estados
Veracruz, Hidalgo, Querétaro y San Luis Potosí viven horas de emergencia. Las lluvias torrenciales provocadas por las tormentas tropicales Raymond y Priscilla han desbordado ríos, inundado comunidades y dejado al descubierto la fragilidad de la infraestructura en zonas rurales y urbanas.
Desde el pasado jueves, más de 7,400 elementos del Ejército, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional han sido desplegados como parte del Plan DN-III-E, en su fase de auxilio.
Las labores incluyen:
• Distribución de víveres, agua potable y atención médica.
• Evacuación de familias en zonas de riesgo.
• Limpieza y desazolve de caminos y viviendas.
• Habilitación de albergues temporales en municipios como Álamo y Cerro Azul (Veracruz), Axtla de Terrazas y Tamazunchale (San Luis Potosí).
En San Luis Potosí, por ejemplo, se han entregado más de 3 mil despensas y 6 mil litros de agua embotellada en comunidades como San Vicente Tancuayalab y Tanquián de Escobedo.
El saldo humano: hasta el momento, se reportan 31 personas fallecidas a causa de las lluvias. Las autoridades monitorean constantemente los niveles de los ríos y alertan sobre posibles deslaves en zonas montañosas.
“Las y los soldados del pueblo de México continuarán brindando apoyo humanitario, médico y logístico en las zonas de mayor necesidad”, declaró la Secretaría de la Defensa Nacional.
¿Emergencia climática o negligencia estructural?
Mientras las fuerzas armadas reparten ayuda, la pregunta persiste: ¿cuántas de estas tragedias podrían evitarse con planificación urbana, drenajes funcionales y políticas de prevención?


