Los acompañantes del presidente de México Andrés Manuel López Obrador advirtieron la cercanía presidencial con el director general de Pemex Octavio Romero así como también un trato más bien distante con Rocío Nahle.
El presidente fue enfático en ciertas conversaciones del pasado jueves en que si la refinería no opera con plenitud, la secretaria de Energía, a cargo de la obra, no tiene futuro electoral ni en Veracruz ni en ninguna geografía. A cargo del Corredor Interoceánico: Marín quería ser candidato a gobernador de Quintana Roo pero la respuesta de su amigo López Obrador fue que se concentrara en esa obra estructural. Lo electoral nunca sobre lo programático.
El presidente entiende que Dos Bocas comenzará a producir combustibles a mediados de año pero su operación plena será hasta el año que viene, no dan los tiempos para la aventura electoral en Veracruz. Tampoco para coordinar una eventual campaña presidencial.

¿Tendrá que ver esta negativa a los sueños electorales de la funcionaria con ciertos relatos que escuchó el presidente sobre problemáticas severas al interior de Dos Bocas? En Pemex se habla de un incidente de gravedad no dado a conocer.

Adán Augusto López Hernández que quiere que el candidato de la 4T en dicha entidad sea su amigo Sergio Gutiérrez Luna, quien, por cierto, ha comenzado a operar contra Nahle sin la discreción requerida. 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *