A pesar de ser parte de la misma alianza, parece que hay tensiones entre ellos. El fracaso electoral de Xóchitl Gálvez ha debilitado a la oposición en general, y la alianza enfrenta desafíos para su futuro.
La oposición no solo perdió en la carrera presidencial, sino también en el Congreso y en varios Estados. El PAN, el PRI y el PRD salieron debilitados frente a sus rivales, con menos opciones relevantes para elegir y sin una clara brújula ideológica.
La continuidad de la alianza está en duda, y Xóchitl Gálvez ha expresado su preocupación por el futuro del país si la coalición pierde nuevamente en las próximas elecciones.
Además, antes de las elecciones, Gálvez también resolvió un distanciamiento entre el PAN y el gobernador de Coahuila.
La campaña de Xóchitl Gálvez fue objeto de análisis, con aciertos y tropiezos, mientras luchaba por remontar en las encuestas.
En resumen, la relación entre el dirigente nacional del PAN y Xóchitl Gálvez ha sido tensa y complicada después de los resultados electorales. Ya que Xóchitl Gálvez salió el domingo a reconocer su derrota y por haberse comunicado con ClaudiaSheinbaum para felicitarla. Mientras, Alejandro Moreno sigue cerca de Xóchitl apoyándola en sus decisiones.