En Brasil, se incendió el Edificio Joelma

El 1 de febrero de 1974, a primeras horas de la mañana, en el piso 12 se originó un incendio que se expandió rápidamente hasta alcanzar los 25 pisos del Edificio Joelma, dejando un saldo de 188 personas fallecidas y 280 heridos, dando lugar a una de las peores tragedias de Brasil y la peor en la historia edilicia de Sao Paulo.
Ese día, los 25 pisos del conocido Edificio Joelma, ubicado en la Avenida 9 de julio número 225 en la ciudad de Sao Paulo, en Brasil, ardieron sin remedio, la construcción carecía de alarmas y sistema contra incendio, luces o salidas de emergencia, y los sistemas de aire acondicionado habían sufrido una enorme cantidad de averías desde su instalación.
El edificio Joelma permaneció cerrado durante cuatro años hasta que fue completamente restaurado, manteniendo su estructura fundamental. Fue reinaugurado con el nombre Praça da Bandeira, y hasta hoy, es sinónimo hoy de la peor tragedia a nivel mundial en edificios de altura, con excepción del atentado a las Torres Gemelas de Nueva York.
CRÉDITOS IMAGEN
BY NÚCLEO EDITORIAL – EDIFÍCIO JOELMA, CC BY 2.0, HTTPS://COMMONS.WIKIMEDIA.ORG/W/INDEX.PHP?CURID=63952835



Tragedia del transbordador Columbia

Un día como hoy pero en el 2003, ocurrió la desintegración en la atmósfera del transbordador espacial Columbia a la vuelta de la misión STS-107, en la que perecieron sus siete tripulantes.
La causa inmediata del accidente fue un hueco en el borde de ataque –el borde delantero– del ala izquierda de la nave, hueco por el que se coló aire a varios miles de grados de temperatura dentro del ala, destruyendo esta, lo que a su vez provocó que el Columbia comenzara a dar tumbos.
A mucha menos altura y velocidad, en un avión dotado de asientos eyectables, perder un ala podría haber sido un accidente al que la tripulación hubiera sobrevivido.

A la altura y velocidad a la que iba el Columbia, no tuvieron ninguna oportunidad aunque la nave hubiera incorporado este tipo de asientos; de hecho, tras analizar los datos disponibles, la comisión de investigación llegó a la conclusión de que no tuvieron ni tiempo de reaccionar antes de quedar inconscientes a causa de la violencia de la desintegración de la nave. En un informe de la NASA sobre el accidente de 2003 se reveló que la tripulación supo que iba a morir tan solo 40 segundos antes de que el transbordador se desintegrara.
El hueco del ala a su vez fue causado por el impacto de un fragmento de la espuma de protección del tanque de combustible que se desprendió durante el despegue unos 82 segundos después del lanzamiento.
Los desastres del Columbia, del Challenger, y del Apolo 1 son un recordatorio de que la exploración espacial, aunque nos parezca algo cada vez más cotidiano, no está exenta de riesgos.

Créditos:
Imagen: NASA
Texto: History Channel


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *