En lo que podría ser su última aparición como lanzador de los Cachorros de Chicago, Kyle Hendricks recibió una calurosa ovación al liderar a su equipo a una victoria por 3-0 sobre los Rojos de Cincinnati. El encuentro, disputado en el icónico Wrigley Field con fuertes vientos provenientes del noreste, vio a Hendricks dominar desde el montículo, permitiendo solo dos sencillos y dos bases por bolas a lo largo de 7 1/3 entradas.
Hendricks, que ha sido un pilar en la rotación de los Cachorros desde su ascenso y parte del equipo campeón de la Serie Mundial en 2016, podría estar mirando hacia la agencia libre tras concluir su contrato de cinco años y 70 millones de dólares. Sus compañeros lo despidieron con abrazos antes de que dejara el montículo, mientras que los 38,180 asistentes le ofrecieron una resonante ovación de pie.
El juego permaneció sin anotaciones hasta el octavo inning cuando Dansby Swanson inició con un doble. Tras una serie de jugadas estratégicas que incluyeron un sencillo de Cody Bellinger y una base por bolas intencional a Seiya Suzuki, Isaac Paredes, como emergente, conectó un sencillo que impulsó la carrera de la ventaja. Pete Crow-Armstrong amplió la diferencia con otro sencillo productor, seguido por una base por bolas con las bases llenas a Mike Tauchman, sellando así el resultado final.
Este triunfo no solo subraya la contribución continua de Hendricks al equipo sino también marca un emotivo momento de transición para los Cachorros, mientras se preparan para posibles cambios en su alineación en la próxima temporada.