La jornada del Día de Acción de Gracias en la NFL concluyó con tres victorias esperadas, pero todos los partidos fueron más reñidos de lo anticipado. Detroit, Dallas y Green Bay, aunque favoritos, tuvieron que esperar hasta los últimos minutos para asegurar sus victorias, lo que refleja la paridad que caracteriza a la liga. En este día de fútbol, la emoción y la incertidumbre estuvieron presentes hasta el último segundo.

En el primer partido, Detroit Lions parecía encaminarse a una victoria cómoda al irse al descanso con una ventaja de 16-0 sobre Chicago Bears. A pesar de un buen inicio en el tercer cuarto por parte de los Bears, quienes anotaron rápidamente, el juego se apretó cuando Chicago sumó dos touchdowns en el último cuarto, poniendo el marcador 23-20. Sin embargo, con solo 6 segundos en el reloj, los Bears tomaron una decisión arriesgada al intentar un pase largo en lugar de buscar un gol de campo. Esta jugada fallida permitió a los Lions sobrevivir y obtener su décima victoria consecutiva, mejorando su récord a 11-1.

Por otro lado, los Dallas Cowboys también pasaron por dificultades, a pesar de haber tomado una ventaja de 27-10 sobre los New York Giants. En el último cuarto, los Giants lograron anotar dos veces y acercarse peligrosamente a 27-20, con 2:18 en el reloj. A pesar de la presión, Cooper Rush encontró a Brandin Cooks en una jugada clave para sellar la victoria con 2 minutos restantes. Este triunfo, el primero en casa desde diciembre de 2023, no asegura a Dallas en los playoffs, pero ofrece algo de esperanza para un equipo que ha sido golpeado por las lesiones.

Finalmente, el partido nocturno entre los Miami Dolphins y los Green Bay Packers se tornó en una pesadilla para los Dolphins. Un error en los equipos especiales y una defensa desorganizada les costaron caro. Tras un fumble de Malik Washington en un despeje, Green Bay aprovechó la oportunidad para adelantarse rápidamente 14-0. Aunque los Dolphins intentaron una remontada, reduciendo la diferencia a 30-17 en el último cuarto, su ofensiva no logró concretar el milagro en los últimos minutos. Con este revés, Miami queda estancado con un récord de 5-7, complicando gravemente sus opciones de clasificar a los playoffs en la Conferencia Americana.

A pesar de que los tres favoritos lograron la victoria, los partidos fueron un claro recordatorio de la competitividad de la NFL, donde las sorpresas pueden ocurrir en cualquier momento, incluso con grandes ventajas a favor.