La gobernadora del Estado de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, brindó una rueda de prensa y en ella pormenores sobre la muerte de José Noriel Portillo Gil, alias “El Chueco”, generador de violencia encontrado muerto en Choix, Sinaloa. Expuso sobre esto “Nuestra misión no termina aquí, nuestros esfuerzos están focalizados en la resolución de este hecho”.
Agregó a su discurso “tenemos que dar certeza a los chihuahuenses que han sido lastimados por la violencia”.
Para su mensaje la acompañaron Gilberto Loya Chávez, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, el Fiscal General, César Jáuregui, Constantino Rivera de la Guardia Nacional, Anastasio Santos Álvarez, de la 5/a Zona Militar y José Simeón Esparza Peinado, director de Despliegue de la Secretaría de Seguridad Pública.
Argumentó la mandataria que desde el primer día de su Gobierno, se trabajó de forma intensa en estrategia de seguridad para “dar respuesta a los generadores de violencia en la zona serrana”.
Afirmó, después de los hechos en los cuales dos jesuitas fueron asesinados, así como dos civiles, activaron mecanismos de coordinación para brindar seguridad a los pobladores de Cerocahui. Detalló, durante las acciones, lograron detener a 34 miembros del crímen organizado, resguardar 42 armas de alto calibre, 28 vehículos ilegales y equipo táctico. Así como aseguramiento de dos toneladas de marihuana.
Con ello, describió Campos Galván, aunado a la disminución de la tala clandestina, venta ilegal de cerveza y eliminar la extorsión a proveedores de las distintas compañías mineras, fueron agotando las fuentes de financiamiento del grupo de “El Chueco” y lo obligaron a reducir su campo de acción.
Cerca del final de su discurso expuso “reconozco el trabajo coordinado de los tres niveles de Gobierno, nuestra misión no termina aquí, nuestros esfuerzos están focalizados en la resolución de este hecho. Más allá de méritos y medallas, tenemos que dar certeza a los chihuahuenses que han sido lastimados por la violencia”.