Ariana Grande reveló en una reciente entrevista con Vogue Italia cómo sus vivencias desde la infancia influyen en su arte y en su vida personal. La cantante destacó el poder de la sororidad y cómo la solidaridad entre mujeres ha sido fundamental en su trayectoria. «Espero que este sea un momento para la hermandad, para la fuerza de las mujeres y para una cierta magia femenina», expresó, reflexionando sobre el impacto de estas conexiones en su carrera.
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Desde sus primeros pasos en Broadway hasta su consagración en la industria musical, Ariana ha sabido mantener su esencia en medio del frenesí de la fama. Fotografiada por Elizaveta Porodina para la portada de Vogue, la artista compartió su visión sobre la evolución de su imagen y su búsqueda de autenticidad. «Con estas imágenes queríamos recrear una bruja etérea y buena, pero con un lado triste y oscuro», comentó sobre la sesión fotográfica que refleja su transformación personal y profesional.
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La relación de Ariana con su familia también ha sido clave en su crecimiento. Nacida en Boca Raton, Florida, creció entre dos mundos opuestos: su madre, Joan, una mujer de negocios fuerte y decidida, y su padre, Edward, un artista con alma poética. «A veces me siento como un extraterrestre, pero todo tiene sentido cuando estoy con mis dos padres», confesó. La separación de sus padres cuando tenía ocho años marcó profundamente su infancia, pero con el tiempo logró reconstruir su relación familiar, destacando el esfuerzo personal que implicó.
El papel de Glinda en la adaptación cinematográfica de Wicked representó un sueño hecho realidad para Ariana. Desde niña, el musical la fascinó y cuando llegó el momento de audicionar, se preparó minuciosamente. «Para la segunda audición, llené mi armario con vestidos rosas para conectar con la esencia del personaje», reveló. Su dedicación se reflejó en cada detalle, demostrando su compromiso con el rol. Además, en la alfombra roja de los Oscar, anticipó que su atuendo será una extensión de esta historia, con un toque mágico y vintage.
A lo largo de los años, Ariana ha aprendido a transformar la adversidad en crecimiento. La pérdida de su ex pareja Mac Miller y el atentado en su concierto en Manchester fueron eventos devastadores, pero encontró en el humor y la terapia herramientas para sanar. «Para mí la risa tiene que ver con la curación», afirmó, explicando cómo la vulnerabilidad se ha convertido en una fortaleza. Su capacidad para plasmar estas emociones en su música la ha convertido en una artista que trasciende, inspirando a sus seguidores con su autenticidad y resiliencia.