Todos hemos visto el trabajo de la OMS para responder a las enfermedades que causan emergencias en distintos países, sin embargo, este no es el único propósito de la organización. El director general de la OMS menciono que a pesar de que las emergencias sanitarias son las que aparecen continuamente en los titulares también existen otras acciones que se realizan para proteger y promover la salud.
Se ha ayudado a diferentes países a restablecer el sistema de salud que se vio afectado por la pandemia, como es el caso de la inmunización sistemática, donde se observo un mayor descenso sostenido en la vacunación infantil en los últimos 30 años.
A consecuencia de esto, 25 millones de niños no recibieron vacunas que pueden salvar sus vidas y remediar esto es una de las prioridades de mayor importancia.
Además este año se ha llevado el apoyo continuo al despliegue de la primera vacuna contra el paludismo mundial, el cual ya ha llegado a más de un millón de niños en África.
Nuevos informes han destacado por primera vez la carencia de critica en los servicios de salud bucodental, salud de refugiados y migrantes, prevención y control de infecciones, discapacidades, etc.
Se ha trabajado arduamente para situar la salud en las prioridades más altas de la agenda climática, cuando el mundo se encuentra en medio de un aumento continuo en la frecuencia y gravedad de fenómenos meteorológicos extremos.
Se alerto sobre el aumento en la resistencia en las infecciones bacterianas y se publico la primera lista de infecciones fúngicas prioritarias que ponen en peligro la salud.