Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

Durante el mediodía de este 14 de enero, en la concurrida calle Libertad del centro histórico de la ciudad de Chihuahua, dos jóvenes llamaron la atención de los transeúntes mientras paseaban acompañados por tres perros. Al acercarnos, descubrimos una historia llena de cariño hacia los animales.

Apiel y Debani, los jóvenes protagonistas, accedieron a platicar un poco sobre su peculiar familia de mascotas. Entre risas, mencionaron que además de los tres perros –un schnauzer, otro schnauzer miniatura y un chihuahua, llamados Alberta, Mica y Paloma, respectivamente–, también tienen dos gatos, Sador y Mushu, y una gallina llamada Kiki.

«¿Y la gallina es para poner huevos o nomás de mascota?» les preguntamos. Entre carcajadas, respondieron: «De mascota.»

Aunque podría pensarse que mantener a tantas mascotas sería un desafío, Apiel y Debani compartieron que no resulta tan costoso. «A los gatos les compramos patas de pollo, son baratas. A los perros les gusta mucho el hígado, y la gallina come pienso que también es económico,» explicaron.

Los jóvenes también revelaron algunos trucos que utilizan para cuidar la salud de sus animales sin depender siempre de visitas al veterinario. «Por ejemplo, cuando les duele el estómago, les damos pepto-bismol. Es parecido a lo que usamos nosotros y les ayuda,» comentaron.

Entre la conversación, destacaron el origen de sus mascotas, mencionando que los schnauzers, aunque de raza alemana, nacieron en México. Además, resaltaron lo fácil que es cuidar de un chihuahua: «Si a usted se le cae un totopo, ya con eso. Comen muy poco.»

Con esta breve pero encantadora entrevista, queda claro que el amor por los animales no conoce límites y que, con creatividad y cariño, es posible ofrecerles una vida feliz sin necesidad de grandes gastos.