Redacción
Hoy, a las 11:00 horas en punto, la Ciudad de México se unió al Simulacro Nacional 2024, con una participación destacada en la emblemática Avenida Paseo de la Reforma. El ejercicio, que simuló un sismo de magnitud 7.5 con epicentro en Acapulco, Guerrero, movilizó a miles de capitalinos y puso a prueba los protocolos de emergencia de la ciudad.
En la Torre Reforma, ubicada en Paseo de la Reforma 483, se observó uno de los escenarios más impactantes del simulacro. Cuerpos de emergencia, incluyendo elementos de la Secretaría de Marina, la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), la Secretaría de Seguridad Ciudadana, el Heroico Cuerpo de Bomberos y la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, realizaron ejercicios hipotéticos de rescate y atención a emergencias.
«La coordinación entre las diferentes instituciones fue ejemplar», comentó la Mtra. Myriam Urzúa Venegas, titular de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil. «Este tipo de ejercicios nos permite identificar áreas de mejora y reforzar nuestra capacidad de respuesta ante un sismo real».
Una novedad en este simulacro fue la activación de alertas en teléfonos celulares. Los residentes de la Ciudad de México y área conurbada recibieron un mensaje de texto acompañado de un sonido distintivo, diferente al de la Alerta Sísmica tradicional. Esta nueva herramienta no requirió la descarga de ninguna aplicación y funcionó incluso en dispositivos sin internet o saldo.
El Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, quien encabezó el Comité de Emergencias desde el C5, expresó su satisfacción con el desarrollo del simulacro: «La participación ciudadana ha sido fundamental. Estos ejercicios nos ayudan a estar mejor preparados y a fortalecer nuestra cultura de prevención».
En total, más de 25,000 inmuebles en la ciudad se registraron para participar en el simulacro. La Alerta Sísmica se transmitió a través de 13,989 altavoces distribuidos por toda la ciudad, así como en televisoras, radiodifusoras y edificios públicos y privados equipados con receptores especiales.
Es importante destacar que este simulacro no se limitó a la capital. En Chihuahua, por ejemplo, se realizaron ejercicios similares, incluyendo un notable simulacro en el edificio Eloy S. Vallina, demostrando el alcance nacional de esta iniciativa de prevención.
Juan Manuel García Ortegón, coordinador general del C5, hizo un llamado a la ciudadanía para reportar cualquier falla en los sistemas de alerta: «Su retroalimentación es crucial para mejorar nuestros sistemas y garantizar una respuesta eficaz en caso de un sismo real».