Han transcurrido más de 10 años desde la caída de Jenni Rivera, quien perdió la vida en un accidente de avión después de su presentación en la Arena Monterrey, Nuevo León, el 9 de diciembre de 2012.

Después de su trágica muerte, diversas personas han revelado que la Diva de la Banda fue objeto de varias amenazas de muerte. En una entrevista con Pepe Garza, Jenni incluso compartió que el FBI la había alertado sobre posibles intentos contra su vida.

Recientemente, Pedro Rivera reveló en una entrevista con Pati Chapoy en el programa «Ventaneando» que aconsejó a su hija retirarse de los escenarios. Esto ocurrió después de que ella le confesara que la estaban obligando a presentarse en un lugar sin recibir ninguna compensación económica.

“Ella en una ocasión me platicó que iba a hacer un evento en tal parte. Entonces dice: ‘Lo que pasa es que no voy a ganar nada porque las personas que me llevan ahí dicen que no me van a pagar y tengo que ir’. Entonces quiere decir que a ella me imagino (que sí la amenazaron)”, detalló.


En el año 2012, Jenni Rivera estaba experimentando el pináculo de su carrera, pero al mismo tiempo enfrentaba graves riesgos. En ese momento, su padre, Pedro Rivera, le instó a apartarse de los escenarios y proteger su integridad. A pesar de la recomendación paterna, la cantante se negó, atribuyendo su decisión al éxito que estaba teniendo al realizar lo que más amaba.

«Yo le decía: ‘Hija, ¿por qué? Ya has alcanzado tus metas, podrías hacer unos pocos eventos, ganar bastante dinero y retirarte’. Sin embargo, siempre estaba presente el deseo de seguir haciendo lo que amaba, y eso es algo que no se puede detener», comentó.

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Finalmente, Pedro Rivera recordó cómo recibió la noticia del fallecimiento de su hija. Reconoció que inicialmente pensó que era una broma de mal gusto, e incluso volvió a acostarse después de la primera llamada.

«Fue muy difícil para mí, pero al principio lo tomé como una broma. Me llamaron alrededor de las 4 de la mañana, no sé exactamente cuándo ocurrió el accidente. En ese momento pensé que era una broma, así que me volví a acostar. Después, recibí más llamadas, así que finalmente me levanté y fui a la casa de Rosa Amelía, porque ya estábamos separados. Cuando llegué, ya había mucha gente esperando la noticia», concluyó.

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