Si para un adulto puede resultar incomodo saludar de beso, es claro que para un niño que se encuentra en crecimiento que también lo sea. Los especialistas en el tema señalan de la importancia de no forzarlos, ya que están aprendiendo a respetar su cuerpo, e incluso, puede enseñarles a prevenir o protegerse en caso de abuso.
Al dar apoyo al menor cuando no es su deseo de saludar de beso, se le estará ayudando a fomentar el respeto sobre su cuerpo y prevenir un abuso; con ello, también se le debe enseñar a que sea asertivo al decir “no” y comentarle que existen otras formas para que él pueda manifestar cariño a otra persona.
I. El respeto sobre sus cuerpos
Como adultos, se le debe enseñar a un niño los derechos que tiene sobre su cuerpo, incluyendo el tema de los besos.
Existen 2 grupos de niños: los que no les cuesta tener expresiones de cariño o cercanía hacia familiares, conocidos o desconocidos; y aquellos que se sienten incómodos teniendo que besar a otros. Es en el caso de estos últimos, que se debe de respetar la decisión e incluso ayudarlos a que lo expresen así ante los adultos.
II. La prevención del abuso
La prevención de un abuso sexual comienza desde permitirles no dar besos ni abrazos si así no lo desea.
“Su cuerpo es solo de ellos”.
El consejo que dan especialistas a este tema es: Se le debe explicar al niño que a veces los adultos solo quieren besar o abrazar como una muestra de cariño, pero que si no es su deseo hacerlo, nadie lo debe obligar.
III. Decir que no con asertividad
La mayoría de los niños pequeños no sabrán expresar a los adultos del porque no quieren saludar de beso, por lo que se sentirán angustiados e incluso comprometidos ante la insistencia de los otros, y es aquí, donde los padres deben apoyar al niño y validar sus deseos de no realizar ese tipo de saludo.
IV. Otras manifestaciones de cariño
Si el niño no quiera dar besos o abrazos, es posible enseñarle otro tipo de manifestaciones de cariño, ya sea enseñarles a lanzar besos en el aire, a chocar los puños, dar una palmada en la mano o simplemente que de manera educada saluden de manera verbal.
Es el paso del tiempo, que algunos niños empezarán aceptan los besos de algunas personas y otros seguirán prefiriendo otras formas de saludos. Recuerden que hay que respetarlos para que ellos aprendan a tener el control sobre su cuerpo.